Aunque la presidenta Claudia Sheinbaum ha asegurado que los medios públicos del país gozan de independencia editorial, los contenidos transmitidos en televisión, radio y plataformas digitales muestran una narrativa alineada al gobierno federal y a la llamada “cuarta transformación”.

Desde el inicio de su administración, Sheinbaum no sólo mantuvo la estructura heredada por su antecesor, sino que la fortaleció: designó a Renata Turrent como titular de Canal Once; a Alonso Millán en Canal 22; a Fernando Chamizo en el Instituto Mexicano de la Radio (IMER), y ratificó a Jenaro Villamil al frente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano (SPR), quien ocupa el cargo desde 2019.

El rediseño ha implicado más que una simple reorganización administrativa. En la práctica, los medios públicos han replicado de forma sistemática y sin contraste los posicionamientos del Ejecutivo federal, a través de espacios como Mañanera 360, difundido por los canales 14 y 22, además de las señales radiofónicas oficiales.

Oficialismo sin filtros

Los noticieros Matutino, Meridiano y Nocturno de Canal Once abren sus emisiones con los mensajes emitidos en la conferencia presidencial matutina. Otros programas como Punto de Referencia, transmitido simultáneamente por los canales Once, 14 y 22, retoman sin matices los dichos de la mandataria, en ocasiones incluso frente a señalamientos de espionaje y reformas cuestionadas.

“De las primeras notas con las que arrancan sus noticiarios es el resumen de la conferencia matutina de la presidenta. Entonces, si esa es la línea editorial, no hay mucha diferencia en que tengan supuesta autonomía a que no la tengan”, opinó Andrés Solis, periodista y analista de medios.

La tendencia se extiende también a La Hora Nacional, espacio originalmente dedicado a la difusión cultural, pero que hoy también sirve como plataforma para amplificar la llamada «mañanera del pueblo».

Voces afines en las barras de opinión

Los programas de análisis y debate tampoco escapan al sesgo oficial. Tras la llegada de Turrent a Canal Once, fue cancelado el histórico Primer Plano, espacio plural donde participaban analistas como María Amparo Casar y Leonardo Curzio. En su lugar surgió Masiosare, nueva barra de opinión que en sus primeras emisiones ha privilegiado entrevistas con funcionarios del actual gabinete y figuras vinculadas a Morena.

De acuerdo con una revisión de contenidos, en Masiosare han participado personajes como Martí Batres, Ariadna Montiel, Pablo Gómez y Clara Brugada. También se han dado espacios a simpatizantes del movimiento obradorista como Epigmenio Ibarra y Pedro Miguel.

El programa Los Periodistas, conducido por Álvaro Delgado y Alejandro Páez, ha replicado el modelo: en sus primeras 16 emisiones, todas las entrevistas han sido con funcionarios del gobierno federal o figuras afines al partido en el poder.

Ley ignorada, presupuesto disminuido

Pese a lo establecido en la Ley del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, que en sus artículos 1º, 22º y 25º garantiza la independencia editorial, especialistas consideran que el actual modelo contradice este mandato legal.

Es muy cuestionable que quien impone los lineamientos editoriales sea una persona que ratifica los dichos de quienes ocupan los cargos del poder”, dijo Solis en referencia a Villamil.

Aunque el SPR vio incrementos presupuestales entre 2019 y 2022, los últimos años han traído recortes: de mil 98 millones en 2022 a 365 millones para 2025. Esto, para académicos como Alma Rosa de la Selva, refleja una precarización del modelo, sin que ello implique un distanciamiento real del oficialismo.

Los mal llamados medios públicos federales continúan con algo que no se han podido quitar: su oficialismo. Pero en este caso con una actitud francamente propagandista a favor de Morena”, agregó Jorge Bravo, presidente de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi).

Cobertura sin matices

El 1 de octubre de 2024, la toma de protesta de Sheinbaum fue cubierta de forma especial en todos los medios públicos, con cápsulas, análisis y transmisiones en vivo desde el Congreso y el Zócalo capitalino. La narrativa oficial fue replicada sin contrapeso.

“Es regresar a esos esquemas de los medios oficiosos con el argumento de que es un momento importante para la sociedad”, opinó Solis.

En ese contexto, figuras como Lenia Batres, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, cercanas al partido en el poder, han sido recurrentemente entrevistadas: nueve, cinco y dos veces, respectivamente, en lo que va del año.

Mientras tanto, la presencia de voces críticas o apartidistas se ha reducido de forma sistemática.

Medios nacionales han consignado que esta tendencia contradice los principios fundacionales de los medios públicos, cuyo propósito es servir a la ciudadanía y no al gobierno en turno.