La presidenta Claudia Sheinbaum emitió un nuevo decreto para expropiar 23.4 hectáreas de terreno en cinco entidades del sureste del país, con el fin de continuar las obras del Tren Maya. La declaratoria de utilidad pública fue publicada este viernes en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y afecta a 26 inmuebles de propiedad privada distribuidos en Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.

De acuerdo con el decreto, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) procederá de inmediato a la ocupación de los terrenos, sin que los procesos legales que interpongan los propietarios frenen la posesión.

“Se expropia por causa de utilidad pública la superficie de 234 mil 291 metros cuadrados. La expropiación incluye las construcciones e instalaciones que se encuentren en los bienes inmuebles y que formen parte de ellos”, señala el documento.

Los predios se localizan en los municipios de Palenque (Chiapas); Candelaria, Hecelchakán y Dzitbalché (Campeche); Umán, Valladolid y Mérida (Yucatán), así como Puerto Morelos y Tulum (Quintana Roo). Fonatur Tren Maya S.A. de C.V. y Tren Maya S.A. de C.V. estarán a cargo de ejecutar los actos legales correspondientes.

El decreto establece que, en caso de que los propietarios ya hayan recibido pagos por convenios previos, estos montos serán descontados del total de la indemnización para garantizar la eficiencia y legalidad del proceso.

Rentabilidad, aún lejana

Pese a la expansión del megaproyecto, el Gobierno federal reconoció que el Tren Maya no será rentable en el corto plazo. Tanto la presidenta Sheinbaum como el director del proyecto, Óscar Lozano Águila, admitieron esta semana que el equilibrio financiero podría alcanzarse hasta después de 2030, una vez que se completen la flota de trenes y las instalaciones para transporte de carga.

Tren Maya tiene operando escasamente el año 2024, pero no con toda su flota; estamos operando con un 55% y con eso estamos dando resultados”, explicó Lozano. Calculó que será entre 2027 y 2028 cuando el tren comience a generar ingresos suficientes por carga para cubrir sus costos operativos.

Sheinbaum, por su parte, defendió los 40 mil millones de pesos destinados al proyecto en el Presupuesto de Egresos 2025, asegurando que se trata de una inversión en infraestructura y no de un subsidio directo a la operación.

“El Tren Maya es rentable. En el momento que tenga todos los trenes, la rentabilidad de pasajeros va a existir… Y va a tener ganancias por el tren de carga, que le va a ayudar al de pasajeros”, sostuvo la mandataria.

Meta de pasajeros, ajustada

El proyecto también ha ajustado a la baja sus metas de transporte. Aunque inicialmente se planeó mover tres millones de pasajeros al año, la meta actual es de 1.2 millones, lo que equivale a 3 mil 288 personas diarias. Según el informe presentado en Palacio Nacional, actualmente se trasladan 3 mil 246 pasajeros al día.

A la par del nuevo decreto de expropiación, la Sedatu también publicó una declaratoria de utilidad pública adicional para obras complementarias del Tren Maya en otros puntos de Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. En total, se trata de 44 mil 447 metros cuadrados más, también pertenecientes a propietarios particulares.

Con estas acciones, el Gobierno federal continúa expandiendo el alcance territorial del Tren Maya, pese a los cuestionamientos sobre su rentabilidad, impacto ambiental y legalidad de los procesos de adquisición de terrenos.