Con el respaldo de una estrategia documentada de voto inducido a través de “acordeones”, estos listados que se difundieron masivamente con nombres sugeridos para la elección judicial, Morena se hizo del control del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). De las 17 magistraturas en disputa el pasado domingo 1 de junio, 15 fueron ganadas por personas promovidas por dicho mecanismo, lo que configura una toma casi total del órgano encargado de calificar las elecciones del país.
En la Sala Superior, encargada de validar la elección presidencial y otras de alto impacto, los nuevos perfiles que se perfilan para ocupar los dos asientos vacantes son Claudia Valle Aguilasocho y Gilberto de Guzmán Bátiz García, ambos impulsados desde el llamado “acordeón guinda”. Con el 80.5 % de las actas computadas, se sumarán a una mayoría afín al régimen, conformada por la presidenta del tribunal, Mónica Soto, y los magistrados Felipe de la Mata Pizaña y Felipe Fuentes Barrera.
De concretarse, Morena tendrá mayoría en el máximo órgano jurisdiccional en materia electoral hasta 2027, frente a las voces disidentes de Janine Otálora Malassis y Reyes Rodríguez Mondragón.

La operación se replicó con éxito en las cinco Salas Regionales —Guadalajara, Monterrey, Xalapa, Ciudad de México y Toluca— donde 13 de 15 magistraturas fueron obtenidas por candidatos incluidos en los listados distribuidos a través del sitio “Poder Judicial 4T”. Estas salas, reconfiguradas tras la reforma judicial de 2024, tendrán tres integrantes cada una y vigencia hasta 2033.
Expertos en derecho electoral advierten que esta elección pone en riesgo la autonomía del TEPJF. “No hubo voto libre en su mayoría”, sentenció Luis Carlos Ugalde, exconsejero presidente del IFE. Agregó que esta captura institucional podría derivar en sentencias favorables al gobierno y en una competencia electoral con “piso disparejo”.
La reforma impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en septiembre de 2024 no sólo cambió el mecanismo de elección de magistrados —ahora por voto directo—, sino que eliminó la Sala Regional Especializada, encargada de fiscalizar propaganda anticipada, entre otros temas clave.Con este nuevo mapa de magistraturas y una mayoría alineada a Morena, el Tribunal Electoral que calificará las elecciones de 2027 y 2030 se pinta, desde ahora, de guinda.
