Ismael “El Mayo” Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa y uno de los capos más buscados durante décadas, se declaró culpable este lunes de narcotráfico en una audiencia celebrada en Nueva York, con lo que busca evitar ir a juicio.

“Culpable”, pronunció con voz tenue ante el juez Brian Cogan, el mismo magistrado que en 2019 condenó a Joaquín “El Chapo” Guzmán. Zambada, de 77 años, aceptó haber dirigido una vasta red criminal que operó durante más de tres décadas y haber promovido la corrupción de policías, mandos militares y políticos en México.

El narcotraficante también deberá pagar una multa de 15 mil millones de dólares, además de enfrentar una sentencia que se dará a conocer el próximo 13 de enero de 2026.

Cargos y acusaciones en su contra

Zambada fue detenido el 25 de julio de 2024 en territorio estadounidense, en circunstancias que él mismo describió como una “emboscada” de Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”. La justicia de Estados Unidos lo considera uno de los “más prolíficos y poderosos narcotraficantes del mundo”.

La fiscalía lo acusa de 17 cargos, entre ellos la dirección de una empresa criminal continuada, la importación de toneladas de cocaína, fentanilo, metanfetaminas, heroína y marihuana hacia Estados Unidos, además de lavado de dinero, delitos con armas de fuego y actos violentos relacionados con el Cártel de Sinaloa entre 1989 y 2024.

Aunque la fiscalía renunció a solicitar la pena de muerte, se prevé que la condena sea severa, aunque no tan alta como la cadena perpetua que recibió “El Chapo” Guzmán tras un extenso juicio en el mismo tribunal.

La postura del gobierno mexicano

La presidenta Claudia Sheinbaum minimizó cualquier preocupación sobre las declaraciones que pueda dar “El Mayo” en territorio estadounidense.

“No (hay inquietud). Que vaya a declarar y si lo plantea la fiscalía de Estados Unidos, cualquier tema que tuviera que ver con México tiene que pasar por pruebas y por la Fiscalía General de la República. Hay un procedimiento”, señaló.

Sheinbaum agregó que hasta el momento el Gobierno federal no ha recibido información nueva respecto a la entrega del capo a las autoridades estadounidenses.