La disputa por la defensa del patrimonio cultural en Tepic, Nayarit, escaló en los últimos días hasta la detención arbitraria del activista Isaac Cárdenas Chakin, uno de los rostros principales del movimiento que se opone a la construcción de un nuevo estadio de futbol sobre el terreno que ocupaba la Ciudad de las Artes. Aunque fue liberado días después, el defensor continúa sometido a un proceso penal y permanece bajo arresto domiciliario.

El activista fue acusado de faltas a la moral, cohecho e incitación a la prostitución, cargos que, asegura, son un pretexto para perseguilo por encabezar la resistencia contra el proyecto que impulsa el gobierno estatal. Su detención ocurrió, “casualmente”, antes de una marcha convocada por el caso de Carlos Manzo y a pocos días de que se resolvieran los amparos promovidos por el colectivo.

La Ciudad de las Artes, un complejo que albergaba espacios de danza, teatro, música, áreas verdes y un skatepark, se convirtió desde mayo en el epicentro de una batalla social y jurídica. El anuncio de la construcción del nuevo estadio Nicolás Álvarez Ortega, con capacidad para 12 mil 564 espectadores, implicaba la demolición del espacio cultural sin consulta pública ni licitación.

Cárdenas, también conocido como Chakin, narró que la resistencia cobró fuerza luego de que se viralizara un video en el que modificó un letrero con pintura y se quitó el pantalón para simbolizar la “desprotección” que, afirma, sienten ante el actuar del gobierno. El gesto atrajo a artistas, activistas y ciudadanos, quienes reunieron cerca de 8 mil firmas contra el proyecto.

Sin embargo, el gobierno estatal no abrió un canal de diálogo. Por el contrario, denuncian, respondió con desalojos policiales y presión contra quienes instalaron un plantón en el lugar.

Para el activista, lo que enfrenta es una persecución política sustentada en una “fabricación de delitos”. Sostiene que la fiscalía ha desplegado una estrategia de guerra sucia, apelando a acusaciones sin sustento para intimidar a quienes se oponen a la obra.

“Estoy conmovido de tantas personas que me apoyaron. No atraparon a Chakin, atraparon a una ciudadanía que está enojada y tiene sed de justicia”, expresó en entrevista.

UNA DETENCIÓN CON IRREGULARIDADES

Cárdenas relata que fue detenido el miércoles 12 a las 11:53 horas, un día después de haber sido absuelto de una falta administrativa en el juzgado cívico. Al salir de su casa, fue interceptado por tres personas encapuchadas a bordo de un vehículo sin placas. Ante el temor de que no fueran autoridades, se resistió al arresto.

Luego, según denuncia, fue obligado a firmar documentos en los que se le atribuían delitos que no cometió. Además, se le negó su derecho a una llamada telefónica y a recibir visitas, lo que contraviene el debido proceso.

Tras cuatro días de protestas por su detención, quedó en libertad; sin embargo, el juez determinó mantenerlo bajo arresto domiciliario mientras continúa la investigación, que podría prolongarse hasta por seis meses.

Su abogado confirmó que se busca una suspensión provisional para revocar la medida cautelar, por considerarla desproporcionada y lesiva de su derecho a la libertad.

Cárdenas hizo un nuevo llamado a la presidenta Claudia Sheinbaum para que la secretaría de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, abra un diálogo con la comunidad afectada, algo que, afirma, nunca ha ocurrido.

“Yo creo en el diálogo y en la construcción de la paz. No quise que quemaran ni incendiaran nada. Pero es lamentable que usen a la fiscalía para cometer estos atropellos a los derechos humanos”, indicó.

El activista advirtió que buscará medidas de protección adicionales y reiteró que su lucha seguirá en pie mientras continúan los procesos judiciales y la defensa de la Ciudad de las Artes.

 Con información de Animal Político