La figura del senador Adán Augusto López Hernández atraviesa su momento más crítico. Acorralado por acusaciones de corrupción, omisiones millonarias en su declaración patrimonial y vínculos con personajes ligados al crimen organizado, el exsecretario de Gobernación enfrenta un creciente rechazo ciudadano y político que podría poner fin a su liderazgo en el Senado.

De acuerdo con una encuesta de Polister, el 79.3% de los mexicanos considera que López Hernández debería separarse de su cargo como coordinador de la bancada de Morena. Un 41.4% pide su renuncia definitiva y otro 37.9% se pronuncia por una separación temporal mientras enfrenta las acusaciones.

“El caso Adán Augusto no solo mide la reputación de un político, sino la capacidad de las fuerzas políticas para sostener coherencia y credibilidad institucional”, explicó Milagros Oreja, directora de Polister. “Lo que está en juego es la confianza pública en la palabra y las prácticas del poder”.

Escándalos en cadena

El deterioro del político tabasqueño comenzó con el caso de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco y colaborador cercano de López Hernández, detenido este año en Paraguay tras ser señalado como operador de la red criminal La Barredora.

El propio gobernador de Tabasco, Javier May, reveló que su administración emprendió acciones para desmantelar la estructura criminal heredada del llamado “Comandante H”, lo que derivó en investigaciones tanto de la Fiscalía estatal como de la FGR.

Aunque Adán Augusto ha negado cualquier relación con los delitos imputados a Bermúdez Requena, las explicaciones públicas no han bastado. La presidenta Claudia Sheinbaum ha insistido en que su gobierno “no encubrirá a nadie”, y subrayó que el senador deberá comparecer si es requerido por la Fiscalía.

Un liderazgo en declive

A las acusaciones de corrupción se suma la omisión de 79 millones de pesos en su declaración patrimonial, así como señalamientos de participar en esquemas de huachicol fiscal y maniobras políticas contrarias a la propia agenda de Sheinbaum, entre ellas la inclusión de polémicos transitorios en reformas a la Ley de Amparo.

En el Senado, López Hernández enfrenta resistencia interna. Un grupo de legisladores lo ha interpelado por el manejo de subvenciones y la falta de rendición de cuentas en su bancada. Según fuentes citadas por Político MX, su liderazgo se encuentra “aislado y en evidente desgaste”.

Cercanos con pasado oscuro

El círculo de confianza de Adán Augusto también ha sido objeto de escrutinio. Entre sus allegados destacan empresarios tabasqueños como Fernando Padilla y Amílcar Olán, este último íntimo amigo de Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente López Obrador.

Padilla ha sido señalado por irregularidades financieras superiores a mil millones de pesos, mientras que Olán habría sido beneficiado con contratos millonarios en proyectos estratégicos como el Tren Maya.

Otro de sus operadores, Daniel Flores Nava, murió en 2023 en un accidente aéreo en Veracruz. Era director de Proyecta Industrial de México, empresa que participó en la construcción de la refinería Olmeca de Dos Bocas, uno de los proyectos emblemáticos del gobierno de AMLO.

Morena ante su prueba más dura

Las controversias en torno a Adán Augusto López amenazan con fracturar a Morena en la antesala de las elecciones de 2027, cuando se renovarán 17 gubernaturas y la Cámara de Diputados.

El desenlace de este caso podría marcar un punto de inflexión para el partido oficialista rumbo a 2030: si logra mantener la cohesión o si termina arrastrado por el desgaste de sus figuras más emblemáticas.